Bastoña, en el corazón de las Ardenas

Escrito por: Xavi    8 noviembre 2012     2 minutos

Bosques y colinas. A pesar de ser un territorio poco hospitalario, las Ardenas fueron un pasillo perfecto para llegar a Francia. Por eso, durante la Primera y sobre todo durante la Segunda Guerra Mundial, se vivieron cruentos episodios y duras batallas de las que aún se guardan recuerdos. Por ejemplo, los grandes cementerios llenos de tumbas de soldados, de todas las nacionalidades que participaron en el conflicto.

Una de las ciudades del corazón de esas Ardenas belgas es Bastoña, famosa por ser lugar de paso de una de las grandes pruebas ciclistas de la historia, la Lieja-Bastoña-Lieja. Situada en la cuenca de los ríos Rin y Mosa, Bastoña es una ciudad que debe visitar cualquiera que se considere un apasionado de los conflictos bélicos históricos.

Un auténtico tanque Sherman americano te espera en la Place McAuliffe, en la zona más céntrica de la ciudad, como recuerdo de los intensos combates que se vivieron en la ciudad durante su sitio en 1944. Curiosamente, este es uno de los rincones más visitados por los que acercan a Bastoña, más que la Iglesia de Saint Pierre y otros edificios históricos, lo que indica claramente que es lo que busca el turista cuando se acerca aquí.

Desde el corazón de la ciudad, parten varias rutas que te llevan a los alrededores, a otros pueblos o zonas donde también hay recuerdos de los acontecimientos bélicos. Dos lugares que debes visitar sin duda son el Museo de la Guerra y el Bosque de la Paz. Este último es un lugar que se creó para conmemorar el 50 aniversario de la Batalla de las Ardenas, y en el que cada árbol lleva el nombre de alguno de los 4 mil soldados, entre americanos y belgas, que se vieron en ella.

Muchas veces oirás eso de que algunas ciudades belgas están sacadas de un cuento. Bastoña es una ciudad que está sacada de una historia, pero real, que también conviene tener presente.

Más información | Ville de Bastogne
Foto | Flickr – Esther Westerveld


Comentarios cerrados