Westerlo, una ciudad pequeña con dos grandes atractivos

A unos kilómetros de Amberes, dentro de su misma provincia, se encuentra la ciudad de Westerlo. Westerlo no es una ciudad muy grande, pues apenas rebasa los 20 mil habitantes, y tampoco es un centro de gran atención turística, pero sin embargo, tiene dos grandes monumentos que merecen la pena conocer: una abadía y un castillo.

El conjunto que forma la Abadía de Tongerlo es una pequeña joya belga. Se trata de un monasterio fundado en el siglo XII, de reminiscencias góticas, aunque con bastantes espacios nuevos por así decirlo, pues tanto la Revolución Francesa como un incendio en los años 30 hicieron bastante daño en ella. Los puntos más interesantes de la misma, aparte del paseo por los jardines y otras dependencias que rebosan espiritualidad, es la Iglesia de Tongerlo y el Museo Da Vinci, donde encontrarás copias de algunos de los cuadros más famosos del pintor italiano.

El Castillo de Westerlo, o de los príncipes de Merode, es un castillo de origen medieval precioso. Aunque existe desde el siglo XIII, el actual castillo se levantó en el siglo XVI, siguiendo un estilo renacentista, y enclavado justo sobre un pequeño lago, lo que hace que su estampa sea aún más hermosa.

La pega que tiene este Castillo es que para visitarlo hay que ir exclusivamente en el mes de julio, ya que sólo abre durante los días que se celebra una feria local. Si visitas Amberes durante esas fechas, puedes plantearse la excursión, aunque eso sí, si lo que más te interesa es la Abadía, ésta sí se puede visitar de forma diaria sin ningún problema.

Más información | Gementee Westerlo
Foto | Wikimedia – Micha de Vries

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