Una de las cosillas que podéis hacer para pasar el rato en una ciudad desconocida es perderse en un mercadillo. Y en Gante, por ejemplo, tenéis la oportunidad de hacerlo cualquier día de la semana, ya que los hay a diario y para todos los gustos.
Los que vayáis a visitar la preciosa Gante en el mes de diciembre no os vais a aburrir ni un segundo. Y es que durante el mes de diciembre, y hasta principios de enero, se celebra el llamado Winter Droom, que en español viene a significar "Suenos de invierno".
A mediados del siglo XII, Felipe de Alsacia, Conde de Flandes y amante de las cruzadas en Tierra Santa, decide construirse un castillo que le sirva de residencia en Gante. Si bien no es el primer castillo que se levantó en la ciudad, pues ya el conde Balduino levantó el suyo allá por el siglo IX, este es el que podemos disfrutar hoy día, casi 900 años después que se levantaran sus muros.
Como sé que os gusta la fotografía, y si no os gusta al menos lleváis casi todo el tiempo la cámara fotográfica en la mano, hoy os voy a indicar un lugar desde se pueden disparar unas fotos muy típicas pero también muy bonitas. Está en Gante, y se llama el puente de San Miguel, o Sint Michelsbrug dicho y leído en neeerlandés, que es el idioma oficial de la región de Flandes.
Un laberinto de calles adoquinadas y estrechas, casas con encanto y aire medieval, tiendas y sobre todo restaurantes. Eso es Patershol, uno de los barrios más antiguos de Gante. Antiguo barrio de tejedores, esta parte del casco viejo de esta preciosa ciudad belga ha pasado de ser un lugar para gente de pocos recursos a un sitio de moda e incluso un poco elitista, pues nada más hay que ver lo caro que resulta ahora buscar casa por la zona.
Es curioso que, en general, Bélgica no es un país famoso por sus restaurantes pero sin embargo, son de lo más premiados. De hecho, Bélgica es el país con más estrellas Michelin por número de habitantes, que ya es decir. Dentro de este país, si vamos a destacar una región que destaque por su buen comer esa sería Flandes, y dentro de esta provincia, nos quedamos con la ciudad de Gante.
Una de mis predilecciones belgas, en lo que a ciudades se refiere, es Gante. Esta ciudad, que se encuentra en la confluencia de dos ríos, es una ciudad con mucha vida, muy animada por las noches, y si te gusta especialmente la música, debe ser una de tus opciones el disfrutar de una noche de marcha en Gante cuando viajes a Bélgica.
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