La Plaza Roja de Moscú

La Plaza Roja de Moscú

Escrito por: Xavi    24 junio 2016     3 minutos

Todas las ciudades tienen sus plazas, pero no todas esas plazas adquieren reconocimiento mundial. Sólo unas pocas consiguen ser reconocidas al instante sólo con ver una foto o situadas en un mapa con sólo decir su nombre, y en esa escasa lista de lugares de tal categoría se encuentra la Plaza Roja de Moscú.

La Plaza Roja se considera el centro de Rusia pues ahí está su kilómetro cero

Roja, no porque sea roja, que en realidad lo es porque es el color que más se repite. Aunque predomine el color rojo en los muros de los principales edificios de este lugar, la palabra Krasnaya, que actualmente significa «roja», no tenía el mismo significado tiempo atrás, cuando se erigió este lugar, pues entonces se designaba para llamar «bonito» a algo. Esa palabra se utilizaba para designar a la Catedral y después pasó a formar parte del nombre de la plaza.

Una plaza de la que parten todas las carreteras de Moscú y de Rusia, pero que por fortuna es completamente peatonal. Así que, quitando los vehículos policiales y militares que la cruzan ocasionalmente, es un espacio totalmente libre para recorrer, un punto de reunión para mucha gente, un lugar que ha sido testigo de grandes acontecimientos a lo largo de la historia y, claro está, visita indispensable para todo el que se acerque a Moscú.

Y es aquí encontramos los principales monumentos de la ciudad. Así, está ya la mencionada Catedral de San Basilio, conocida por sus coloridas y particulares cúpulas y que mucha gente confunde con el Kremlin. Esta gran iglesia, que ocupa el extremo sur de la plaza, la mandó construir el zar conocido como Iván el Terrible, allá por el siglo XVI, y en los siguientes años se fue agrandando hasta su aspecto actual.

El Mausoleo de Lenin y las tumbas de otros personajes como Stalin son los lugares más visitados de la Plaza Roja

Del Kremlin lo que vemos en la Plaza son parte de las murallas que protegen este gran recinto, lleno de edificios civiles y religiosos. En esas murallas que delimitan el lado oeste de la Plaza Roja encontramos las sepulturas de grandes figuras de la historia soviética, como Stalin o Gagarin, y muy cerquita de ellas está el Mausoleo de Lenin, donde se expone el cuerpo embalsamado del famoso revolucionaro para todo el que guste de visitarlo.

Otro edificio famoso, y muy rojo (por el color de sus ladrillos), es el Museo Estatal de Historia, institución creada a finales del siglo XIX para mostrar toda la historia de Rusia, interesante para descubrir un país del que conocemos mucho de su historia más contemporánea y poco de la antigua. Muy cerca del Museo está la reconstruida Puerta de la Resurrección, que sirve de entrada a la Plaza Roja.

Todos estos edificios, y alguno más, conforman un espacio alargado de casi 700 metros de longitud y algo más de 100 metros de ancho. El centro de una ciudad como Moscú y de un país como Rusia que, por todo lo que ha sido testigo, recibió el reconocimiento de Patrimonio de la Humanidad.

Foto | Flickr – Kitty Terwolbeck