Escapada para conocer Chipre en pareja
Cuando se habla de Chipre, muchos piensan en sus playas de aguas cristalinas, resorts lujosos y su clima soleado. Sin embargo, esta isla mediterránea guarda secretos sorprendentes que esperan ser explorados por los viajeros que buscan ir más allá de los circuitos turísticos tradicionales. Desde aldeas de montaña hasta monasterios escondidos y formaciones naturales increíbles, te invitamos a descubrir los rincones ocultos más fascinantes de Chipre.
Ubicado en las laderas de las montañas Troodos, Kalopanayiotis es un encantador pueblo tradicional chipriota que parece detenido en el tiempo. Sus calles empedradas, casas de piedra y balcones llenos de flores lo convierten en un lugar perfecto para desconectar. Además, alberga el Monasterio de San Juan Lampadistis, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, y famosas aguas termales.
En el extremo noroeste de la isla, la península de Akamas alberga una de las joyas naturales más secretas de Chipre: la Laguna Azul. De aguas turquesas y rodeada por colinas escarpadas, este rincón es accesible en barco o por vehículos 4×4. Además del baño, puedes disfrutar de rutas de senderismo y observar la fauna local, incluyendo tortugas marinas.
Fikardou es un bonito pueblo, casi deshabitado, es una cápsula del tiempo. Con arquitectura medieval bien conservada, Fikardou ha sido declarado patrimonio nacional. Las casas datan del siglo XV y actualmente funcionan como pequeños museos donde puedes descubrir cómo vivían los chipriotas hace siglos. Rodeado de naturaleza, también es ideal para hacer senderismo.
Kato Drys es una joya rural cerca de Lefkara, famosa por sus bordados. Este pueblo ofrece una experiencia cultural profunda: casas restauradas, talleres artesanales, viñedos y museos familiares donde podrás aprender sobre la producción tradicional de vino, miel y queso. También es hogar de la Iglesia de San Neófito y cuenta con vistas increíbles al valle.
Escondido entre colinas verdes, el Monasterio de Machairas es uno de los lugares más espirituales y tranquilos de Chipre. Fundado en el siglo XII, está dedicado a la Virgen María y rodeado de naturaleza. Desde allí, puedes emprender senderos hacia miradores que ofrecen panorámicas impresionantes del bosque de Machairas.
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