La bicicleta como principal medio de transporte

La bicicleta como principal medio de transporte

Escrito por: Xavi    27 julio 2012     2 minutos

Holanda es el país de Europa con mayor número de bicicletas, y el segundo del mundo por detrás de China. Prácticamente la media casi alcanza la bicicleta por habitante, que ya es decir, por lo que estamos sin duda alguno ante el principal medio de transporte del país.

Para que la bicicleta haya calado tan hondo se han tenido que dar muchas circunstancias, no sólo la tradición o la forma de pensar de la gente. Para que la bicicleta sea tan común hacen falta infraestructuras para ello, y en los Países Bajos las hay sobradamente, con alrededor de 20 mil kilómetros de carriles bici. A esto ayuda que las ciudades sean llanas y sin relieves y que las distancias suelan ser cortas.

Así que al gran número de holandeses que se mueve en bicicleta hay que sumar el gran número de turistas que también toman esta costumbre para moverse por la ciudad. Y es que en muchos lugares se alquilan bicicletas o incluso se organizan tours guiados. Si esta es tu elección, ten en en cuenta que el tráfico puede ser un poco caótico, sobre todo en las grandes ciudades.

Hay tanta gente que usa la bicicleta que los carriles bicis están tan señalizados como nuestras carreteras para coches, y estas señales hay que respetarlas. También están delimitados y hay zonas en las que no se puede pasar. Si están muy concurridos, y sobre todo por turistas, la situación se puede volver hasta incluso un pelín peligrosa porque hay quien se lo toma como un juego y la verdad que los carriles no son para eso. Hay que tener también cuidado con los canales, no acabes en uno de ellos, y asegurar bien la bicicleta, que los robos de las mismas están a la orden del día.

De todos modos, pasear por Holanda en bicicleta, aunque sea un poco tópica, es una experiencia que se debe vivir y más si el tiempo acompaña. Aunque incluso en días malos, te encontrarás que la gente se desplaza en bicicleta y que tiene sus trucos para no mojarse.

Y por supuesto … ¡Acuérdate bien donde la aparcas!

Foto | Juozas Kaziukenas