Cómo dar un paseo en góndola por Venecia

Cómo dar un paseo en góndola por Venecia

Escrito por: Xavi    7 diciembre 2013     2 minutos

Aunque pueda parecer lo contrario, dar un típico y romántico paseo en góndola por los canales de Venecia es bastante sencillo. Y es que no cuesta nada encontrar un gondolieri que nos ofrezca sus servicios, es más, ellos saben venderse muy bien y buscarse sus propios clientes.

De todos modos, es bueno tener unas consideraciones previas a lo que es un paseo en góndola por Venecia, como por ejemplo, el precio. ¿Sabes que hay unas tarifas oficiales y unas rutas ya preseñalizadas por seguir? Pues así es, todo lo que es los paseos en góndola en Venecia está regulado por una sociedad que marca estas directrices.

Lo que más te interesa, claro está, es el precio. Bien, un paseo en góndola de 40 minutos cuesta 80 euros, y cada 20 minutos que se alargue son 40 euros más. Eso de día, porque de noche el precio sube a 100 euros la góndola, más 50 euros los 20 minutos extra. Hay que recalcar que el precio es por góndola y no por persona, así que si sois un grupo, de máximo 6 personas, o no os importa compartir góndola, pues os ahorráis unos cuantos euros.

Luego, están los extras. Si quieres música, hay que pagar. Si el gondolieri sabe cantar y quieres oírlo, hay que pagar. Y si quieres que tome una ruta o un desvío en especial para ver un lugar concreto, seguramente también se te pida más dinero a cambio. Tienes que tener clara esa premisa que en Venecia no se regala nada.

Por supuesto, hay gondoleros que no se ajustan a las tarifas ni a los recorridos oficiales. Los hay que intentarán timar a los turistas cobrando más caro el paseo, y los hay que ofrecerán alguna oferta. Todo es hablar, negociar y regatear, aunque para curarse en salud, siempre pregunta de antemano si se ajustan a las tarifas oficiales.

Y poco más que decir. Procura evitar marearte y procura evitar el Gran Canal, que hay mucho tráfico y eso hace que el paseo sea demasiado movidito. Relájate y disfruta la experiencia que, aunque cara, merece la pena.

Foto | Flickr – Dimitry B