Montaña de Bueren: 374 escalones para disfrutar de la visita a Lieja

La región de Valonia en Bélgica es bastante plana, pero hay un lugar donde se puede encontrar una elevación bastante importante. Se trata de la ciudad de Lieja. No es ni siquiera una montaña, aunque reciba ese nombre. Es la Montaña de Bueren, una elevación que se supera ascendiendo una escalera de 374 escalones y una inclinación del 30%.

Estas escaleras no son ni siquiera las de mayor longitud del continente, pero el recorrido vale la pena y una vez arriba, se puede disfrutar de una excelente vista de la ciudad. Si bien hay escaleras con más escalones, pocas hay con este tipo de inclinación. Así que la falta de respiración no solo la produce la espectacular vista, sino que el esfuerzo que se ha de realizar para ascender también puede provocarlo.

Una escalera monumental

La escalera se terminó de construir en 1880 y su función era la de conectar la ciudad con la ciudadela que protegía esta. Esta funcionalidad duró poco, ya que en 1891 la fortaleza dejó de tener la relevancia militar que tuvo durante mucho tiempo. Pero eso sirvió para convertir las escaleras en el símbolo de la ciudad. Reciben el nombre de Vincent de Bueren (1440-1505), uno de los mayores defensores de Lieja en el siglo XV y esos primeros años del siglo XVI.

Los visitantes suelen pensarse bastante si vale la pena realizar el esfuerzo que implica ascender esos 374 escalones y luego volver a bajar por ellos. En su camino se encuentran a vecinos de Lieja subiendo y bajando por ella, porque es un camino muy transitado y hay casas junto a la escalera.

La lucha por el zanco de oro, una tradición de Valonia, en Bélgica

En Valonia se celebra la fiesta nacional del 11 al 20 de septiembre y en ellas se celebra la lucha entre los zancudos, que compiten para ganar el zanco de oro.

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Estas escaleras forman parte de la vida cotidiana de Lieja y se celebran actos y eventos en ellas. El más espectacular es Bueren en fleurs, un espectáculo multicolor en el que se colocan 25.000 plantas en la escalera. También se realiza la BueRun, una competición para subir esa exigente escalera y El Nocturno de la ciudadela de Bueren, que se celebra en octubre. En este caso, se ilumina con colores cálidos y de esta manera se consigue una imagen aún más curiosa y agradable de Lieja.

Como detalle curioso, durante el confinamiento a causa de la pandemia de 2020, el explorador Louis-Philippe Loncke subió y bajó 135 veces las escaleras, con un peso de 15 kg a cuestas, para demostrar que se puede realizar actividades deportivas y de aventura cerca de casa.

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