Cinco pueblos de León para disfrutar de una escapada interior

Cinco pueblos de León para disfrutar de una escapada interior

Escrito por: Victor Alós    16 diciembre 2021     3 minutos

La provincia de León ofrece rincones muy agradables donde poder disfrutar de una escapada rural, con pueblos repletos de buenos argumentos para visitarlos.

León es una provincia que puede convertirse en un destino muy agradable. Tanto en verano como en invierno, aunque ya sabemos que en la época invernal puede resultar bastante frío. Las temperaturas en invierno son bajas, pero eso no hace que los pueblos de esta provincia dejen de ser acogedores y muy agradables para visitar.

Peñalba de Santiago.

Este pueblo leonés está integrado en la Asociación de Pueblos más Bonitos de España. Se encuentra ubicado en la comarca de El Bierzo,a 1 100 metros de altitud, entre los Montes Aquilanos. Sus casas de piedra, madera y teja, organizadas por calles empedradas. Se puede visitar la iglesia de Santiago, que data del siglo X. Desde allí se pueden visitar el Valle del Silencio y la Tebaida berciana, la Cueva San Genadio y otros lugares de interés, como su molino.

Castrillo de los Polvazares.

La población se encuentra muy cerca de Astorga, en la comarca de Maragatería. Es uno de los puntos enmarcados en el Camino de Santiago en su recorrido por León. Sus casas son de piedra rojiza y tejas de cerámica y algunas de ellas lucen escudos nobiliarios. La iglesa de San Juan Bautista y los dos puentes sobre el río Jorga son los lugares a visitar. Pero no hay que olvidar los distintos mesones donde se puede degustar el conocido cocido maragato. Es Conjunto Histórico-Artístico desde 1980 y Patrimonio Mundial de la Humanidad desde 2015.

Castrillo Polvazares 2

Balboa.

También está en la comarca de El bierzo y entre su patrimonio hay un un castillo del siglo XIV, aunque solo quedan las ruinas del mismo. Se puede visitar además su iglesia románica de Santa Marína, de los siglos XIII y XVI y las pallozas. Estas son contrucciones tradicionales de planta circular u ovalada, con paredes viejas de piera y tejado cónico de paja. Otra de las cosas curiosas que hay que conocer en este pueblo es la Casa de las Gentes, que acoge un museo con tallas de madera y la Oficina de Turismo. Un paseo por el castañar que hay cerca del pueblo puede complementar la visita.

Castilla y León estará más presente en ferias gastronómicas en 2022

Castilla y León estará más presente en ferias gastronómicas en 2022

Tierra de Sabor de Castilla y León estará presente en diferentes ferias gastronómicas nacionales de cara al año 2022.

LEER MÁS

Molinaseca.

En el Camino de Santiago, en El Bierzo, se levanta este pueblo. El puente romano de los Peregrinos, sobre el río Meruelo. A la entrada del pueblo se encuentra el Santuario de Nuestra Señora de las Angustias, del siglo XVII. Es de estilo barroco y está construido sobre una antigua ermita del siglo IX que servía de albergue para los peregrinos. La Calle Real es la principal de la población y alberga el mayor número de restaurantes y tiendas. En Molinaseca se encuentran las callejas, espacios limpios entre las casas que ejercen de cortafuegos y que son el origen del apellido Calleja. También se puede pasear por la plaza García Rey y la de Santo Cristo, que tiene un Monumento al Peregrino, en forma de crucero y un curioso monolito.

Molinaseca 3

Riaño.

El Riaño original fue inundado tras la construcción del embalse de Riaño y, apartado del agua, se levantó el pueblo actual. Pertenece a la Montaña de la Cantábrica Leonesa, antesala de los Picos de Europa. La iglesia de San Martín de Pedrosa del Rey, del siglo XVI, se trasladó hasta el pueblo, piedra a piedra. Se puede visitar un Museo Etnográfico, un monumento al Silencio y un hórreo leonés. En las afueras se encuentran varios miradores, como el de Las Hazas y el de Valcayo. Una senda peatonal de un kilómetro, que recibe el nombre de Paseo del Recuerdo, lleva hasta el banco más bonito de León. Desde él se ve el pantano y el embarcadero, desde donde parten los cruceros que recorren el embalse.


Comentarios cerrados