Ronda, la ciudad frente al abismo

Ronda, la ciudad frente al abismo

Escrito por: slledo    18 septiembre 2012     2 minutos

Ronda es una de las ciudades andaluzas que recibe más visitantes. Aunque podríamos quedarnos con los tópicos que envuelven a la ciudad como la tauromaquía, sus buenas temperaturas y su gastronomía, también es cierto que alberga mucha historia y unos bellos paisajes.

Comencemos con la tauromaquia y su monumental Plaza de toros, una de las más antiguas y grandes. El orígen de la plaza se remonta al reinado de Felipe II, gobernante que decidió crear en 1572 la Real Maestranza de Ronda para mantener el arte ecuestre. Los entrenamientos de los caballos también incluían las envestidas de los toros, cosa que agradable en demasía al pueblo. Cuando entraron los toreros a pie en el siglo XVIII y el arte del toreo comenzó a hacerse popular se decidió construir esta plaza para albergar las corridas.

Si rascamos un poco más la superficie de su historia podremos apreciar el paso de civilizaciones muy anteriores a la nuestra. Desde antepasados prehistóricos que dejaron su huella en la Cueva de la Pileta mediante el arte rupestre pasando por necrópolis megalíticas. Los romanos también se asentaron en estos terrenos y como prueba encontramos el yacimiento arqueológico de la ciudad Acinipo.

Más tarde se establecieron en ronda los musulmanes, dejando tras ellos innumerables edificios, costumbres y avances con su personal estilo islámico. Finalmente, tras la conquista de los Reyes Católicos en el año 1485, la ciudad empezó a modificarse hasta convertirse prácticamente en lo que es ahora. Por último pero no menos importante, su belleza. Uno de los lugares más bonitos es «La Ciudad», el casco más antiguo. Está situado frente a un acantilado lo que nos proporciona una panorámica como menos llamativa.

Vía | Turismo de Ronda
Foto | Flickr-El bazar de sherezade