Soria, ciudad de los poetas

Soria, ciudad de los poetas

Escrito por: bgarcia    19 mayo 2013     2 minutos

Antonio Machado, Gerardo Diego y Gustavo Adolfo Bécquer cantaron a Soria. Bécquer se enamoró de su silencio y pureza, Diego y Machado dejaron clara su fascinación en su obra. Y es que Soria es pequeña, algo más de 40.000 habitantes, y la tenemos olvidada pero hay que ser muy osado para llevar la contraria a tan grandes nombres.

Soria capital se puede visitar en un día, aunque todo depende de lo que queramos profundizar. Es perfecta para recorrerla a pie callejeando por sus plazas, callejuelas y paseos. El río Duero bordea la ciudad y es protagonista en su día a día. A él se asoma la ermita de San Saturio que cuelga de un roquedal sobre una gruta visigoda llamada cueva de Peñalba. En su interior impresionantes frescos y los restos del patrón de la ciudad, San Saturio.

En Soria está una de las maravillas del románico español, los Arcos de San Juan de Duero. De principios del siglo XIII lo más sorprendente es la mezcla de estilos en sus arcos: de medio punto, entrelazados y califales entre otros. Pero no es el único monumento de este estilo que es el predominante en la ciudad. Podemos encontrarlo en: la iglesia de San Juan de Rabanera, monumento nacional en la que destaca su ábside; la iglesia de Santo Domingo, actualmente Convento de las Clarisas donde no solo podemos disfrutar del arte sino también de su excelente repostería; la Concatedral de San Pedro y su portada sur de estilo plateresco; el Monasterio de San Polo; Santa María la Mayor; San Agustín el Viejo; San Ginés; San Miguel de Cabrejas o la iglesia de San Nicolás.

Hay monumentos religiosos en otros estilos y civiles que merece la pena visitar como el Castillo de Soria, del que se conservan las ruinas de la Torre del homenaje, el recinto amurallado interior y restos de la barrera exterior con su acceso flanqueado por dos cubos cilíndricos. El Palacio de los Condes de Gomara, actualmente la sede de la Audiencia provincial y la Casa de los Poetas sita en la tercera planta del edificio del Círculo Amistad Numancia y que rinde homenaje a los hombres de letras que pasaron por esta ciudad.

De paso o como destino final hay que tomar el camino a Soria, respirar tranquilidad y aprovechar para visitar su provincia, maravilloso ejemplo de riqueza natural y cultural española.

Foto | Flickr-Carlos César Álvarez
Más información | Soria ni te la imaginas


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