El corcho, santo y seña de Évora y el Alentejo

Escrito por: Xavi    25 marzo 2016     2 minutos

Portugal es un país plagado de alcornoques, tantos que está considerado como el árbol nacional. Y del alcornoque se extrae el corcho, lo que convierte al país luso en el que más exporta y vende de todo el mundo esta materia que ha sido tan útil y que acompaña desde tiempos inmemoriales.

De hecho, más de la mitad del corcho que hay en el mundo ha salido de Portugal. Y de ese porcentaje, se diría que tres cuartas partes han salido en concreto de la región del Alentejo. Ya se pueden hacer una idea de lo importante que ha sido y sigue siendo para la economía de la región la producción de corcho.

En Évora, una de las ciudades más importantes de la región, han conseguido convertir el corcho y todo lo que mueve en un atractivo turístico más. Más allá de la parte monumental, que recordemos que está catalogada como Patrimonio de la Humanidad, a los turistas que llegan a la ciudad también se les oferta la posibilidad de visitar las fábricas de corcho que hay en las afueras o en pueblos de los alrededores, así como los bosques de alcornoques.

Aunque si hay un lugar que verdaderamente llama la atención a los foráneos es la Calle 5 de Óctubre. Aquí, todas las tiendas venden productos fabricados con corcho y podemos encontrar casi cualquier cosa, incluso alguna que pensábamos que no se podía elaborar con esta materia. No sólo hablamos de souvenirs, sino también de ropa, complementos o bisutería, por citar algunos ejemplos.

Así pues, es de lo más típico acabar comprando regalos y recuerdos fabricados con corcho si se está de visita por Évora. Más que su belleza o por su utilidad, por la curiosidad del mismo.

Foto | Flickr – Ralmoline alm


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