Rotterdam Central, la puerta de entrada a la ciudad

Es bastante probable que llegues a Rotterdam en tren. No lo digo por nada, simplemente es que Rotterdam es una de las ciudades mejores comunicadas por vía ferroviaria, no ya con otras ciudades holandesas sino también con otras ciudades europeas.

Así pues, Rotterdam Central, la estación más importante, es una de las principales puertas de entrada a la ciudad. Una estación muy interesante pues nada más bajarte del tren estarás disfrutando de uno de los primeros atractivos de la ciudad, de una las interesantes obras arquitectónicas tan propias de la moderna Rotterdam.

Rotterdam Central está funcionando desde mayo de 1957, aunque el aspecto actual es radicalmente diferente. En el año 2004 comenzó una remodelación total que, prácticamente diez años más tarde (un poco más de lo esperado), ha transformado completamente la estación, primero para cambiar las vías y adaptarlas a los trenes de alta velocidad y luego para cambiar el edificio, con el reto de integrarlo plenamente en el casco urbano y acabar con esa división en dos que producía la vía cruzando la ciudad.

El nuevo diseño de la estación correspondió a un equipo de varios estudios de arquitectos holandeses. Y es que hablamos de un proyecto de una enorme escala, pues no se trataba tan sólo de la construcción de un edificio sino también del rediseño de las líneas de tranvías y de ferrocarriles locales, entre otras muchas cosas.

El resultado, salta a la vista, es bastante satisfactorio. Más de 100 mil viajeros al día pasan por este lugar y los que lo hacen por primera vez no dejan de maravillarse con la magnitud de la estación y con la cantidad de detalles que la convierten en un lugar algo más que para coger un tren.

Foto | Flickr – Rick Lightelm

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