Karlsruhe, la ciudad abanico del suroeste de Alemania

Escrito por: slopez    19 julio 2013     2 minutos

La segunda ciudad más grande del estado de Baden-Wurtemberg se encuentra localizada al suroeste de Alemania, cerca de la frontera con Francia. Su traducción se denomina el descanso de Carlos, en honor a su fundador, el marqués Carlos Guillermo de Baden-Durlach. Nos estamos refiriendo a la ciudad de Karlsruhe.

Karlsruhe fue fundada hacia el año 1715, con claros tintes barrocos en sus edificios. Gracias al plan urbanístico por el que fue diseñada, todas sus calles desprenden luminosidad unas a otras, creando una gran atmósfera en la misma, por la que se la conoce como la ciudad abanico.

Varios son los lugares de interés turístico y cultural que podemos visitar en la ciudad. Entre ellos, tenemos palacios, iglesias, plazas y museos de gran calado cultural y que convertirán nuestra estancia en Karlsruhe en un placentero e interesante recorrido vacacional.

Palacios como el Palacio de Karlsruhe o el de Gottesaue. El Palacio de Karlsruhe, construido en 1715 en estilo barroco, se diseño para que fuera el punto central de la ciudad. La inmensa extensión de los campos que lo rodean permite apreciar y alcanzar hasta otros estados alemanes como Renania-Palatinado o el Bosque Negro.

El Palacio de Gottesaue fue una abadía benedictina, construida a principios del siglo XX. Este edificio ha visto como se le realizaban numerosas reformas, debido a diferentes circunstancias, llegando su peor momento en la II Guerra Mundial, época en la que fue reducido a escombros. Desde 1989, alberga la Academia Estatal de Música de Karlsruhe.

La Iglesia Principal se encuentra situada en la Marktplatz (plaza del mercado local), destacando por una impresionante torre de más de sesenta metros de alto. En esta interesante plaza, podemos encontrar otros lugares importantes como el Ayuntamiento o su famosa pirámide, ubicada en su centro, y que es símbolo de la ciudad.

Otra iglesia a destacar es la de San Esteban, construida a principios del siglo XIX. Localizada en la zona de Erbprinzenstrasse, destaca sobre todo por sus arcos y por su entrada, totalmente poblada de columnas. A mediados del siglo XX fue reconstruida, quedando ya, en la actualidad, como otro símbolo de la ciudad.

La Ludwigsplatz es otro de los lugares destacados de la ciudad. Situada en el mismo centro de Karlsruhe. Además de restaurantes y cafés donde podemos descansar, tenemos edificios interesantes como el Krokodil, de estilo modernista, o el edificio Erhardt, destacando por sus pinturas murales.

Y en la variedad de museos, podemos encontrar el Museo de Historia Natural, el Museo de Bellas Artes y Artesanía, el Museo de la Plaza del Mercado (Marktplatz), el Museo de Arte Contemporáneo, el Centro de Arte y Tecnología Mediática o el famoso Badisches Landesmuseum, ubicado en el Palacio de Karlsruhe.

Vía | wikipedia
Foto | flickr-korkodush