La gastronomía alemana: Estado de Sajonia-Anhalt

La gastronomía alemana: Estado de Sajonia-Anhalt

Escrito por: slopez    12 junio 2013     2 minutos

Y siguiendo con nuestro paseo por la gastronomía de los estados alemanes, esta semana nos detenemos en el estado de Sajonia Anhalt. Destacando por el paso del río Elba por sus tierras y por su capital, Magdeburgo, este estado tiene una interesante aportación culinaria gracias a la riqueza de su terreno.

La agricultura de la zona, rica en verduras y legumbres, le hace dar un toque muy a sus platos muy parecido a la cultura gastronómica de Baja Sajonia y Brandeburgo. Lugares con platos muy tradicionales de sus raíces, convierten su comida en un exquisito recorrido por todo su territorio.

Entre los platos más destacados de la cocina de Sajonia Anhalt, tenemos los relacionados con el queso. El queso Harper, elaborado con leche agria semidesnatada, con un fuerte olor y picante sabor, que se toma con pan, mostaza o pepinillos en vinagre. O el Lekermäulchen, popular cuajada de leche procedente de la ciudad de Weissenfels.

Platos muy típicos son el Bauernfrühstück, tradicional desayuno de los campesinos elaborado con patatas asadas y tortilla. El Spargel, una especialidad de la localidad de Altmark, compuesto de espárragos y patatas asadas. O el Süsssaure Linsenssuppe, una sopa agridulce de lentejas que incluye morcilla Blutwurst.

Para los más carnívoros, también existen algunas variedades de platos de la zona como pueden ser el Köthener Schusterpfanne, un asado de carne de cerdo combinado con patatas y peras, el Kohlrouladen, carne picada que se envuelve en hojas de col y se sirve con patatas, o el Hühnerfrikassee mit Reisrand, carne de pollo que se guisa con nata y se sirve con arroz cocido.

No podemos degustar una buena comida sin incluir una bebida que nos refresque durante la misma. La cerveza vuelve a aparecer, como en el resto de Alemania, destacando la Garley, la marca más antigua del mundo, la Hasseröder, o el Schierker Feuerstein, un aguardiente original de la ciudad de Schierke.

Y para terminar, un postre que nos haga desaparecer ese sabor salado del almuerzo o la cena. Postres como el Baumkuchen, un pastel en forma de tubo cubierto de chocolate o azúcar, o el Bienenstich, un pastel cuya elaboración se realiza con miel, leche y almendras.

No me digan que no es una delicia para el estómago planificarse un tour con estos magníficos manjares. Una manera más de conocer la historia del país que visitamos, en este caso Alemania, y de los pequeños pueblos que siempre dan esa pincelada tradicional al arte culinario característico del mismo.

Vía | wikipedia
Foto | flickr-Stefan Funke