El Caballero de Madara, curioso relieve en Bulgaria

El Caballero de Madara, curioso relieve en Bulgaria

Escrito por: Xavi    23 octubre 2020     2 minutos

En Bulgaria hay un lugar Patrimonio de la Humanidad muy curioso. Conocido como El Caballero de Madara, es un relieve sobre roca que te sorprenderá.

De normal, cuando pensamos en lugares que son Patrimonio de la Humanidad, imaginamos grandes monumentos como por ejemplo las Catedrales, o ciudades con una enorme historia a sus espaldas, o yacimientos de un gran valor arqueológico. Si bien, en Bulgaria encontramos un lugar señalado como Patrimonio de la Humanidad y que se sale un poco de lo común: un relieve que se le conoce desde siempre como el Caballero de Madara.

Nos situamos en una pequeña población llamada Madara, cerca de la ciudad de Shumen, al nordeste del país. Allí, sobre un acantilado que se eleva casi cien metros de altura sobre el suelo, a alguien se le ocurrió o bien tuvo el encargo de subirse a algo más de veinte metros de altura sobre el suelo y empezar a tallar un relieve de un caballero, de un jinete que armado de lanza se enfrenta y vence a un león, en una alegoría a algún triunfo militar.

La escena se completa con dos animales más, un perro que se encuentra a espalda del jinete, como corriendo hacia él, y un águila que se encuentra delante, como marcando el camino. Aparte de la escena del relieve, se encuentran los restos de textos escritos en griego medieval, que relatan escenas y episodios de hace mucho tiempo atrás.

El Caballero de Madara es un curioso relieve que encontraréis en Bulgaria

El Caballero de Madara es en sí mismo todo un misterio, por muchos motivos. No sé sabe cómo se hizo ni quién o quiénes se encargaron de ello, aunque podemos suponer que es muy difícil. No se sabe a ciencia cierta qué representa la escena, si es real o ficción, ni quién es realmente el caballero, si existió o no. Tampoco se sabe realmente en qué fecha se hizo, aunque gracias a los textos en relieve se estima que fue en los siglos VII, VIII o IX.

Por tanto, se cree que la figura puede ser alguna de las personas que salen nombradas en esas inscripciones, como Telver, Krum u Omurtag. Estos tres nombres pertenecen a los primeros reyes y emperadores de Bulgaria, guerreros nómadas que se asentaron en la región y que se mezclaron con la población local. Tras enfrentamientos con todos los pueblos vecinos, el Imperio Bizantino anexionó y convirtió al cristianismo a este primer imperio búlgaro allá por el siglo IX.

Desde 1979 este curioso lugar es Patrimonio de la Humanidad, siendo de los primeros lugares de Bulgaria en aparecer en la lista de la UNESCO, gracias a que se trata de un relieve único en Europa. Para visitarlo hay que acceder a una reserva arqueológica que también tiene su interés, ya que Madara podría considerarse como la primera capital de ese primigenio imperio búlgaro.

Foto 1 | Wikimedia Commons – Diego Delso
Foto 2 | Wikimedia Commons – Diego Delso


Comentarios cerrados