Villalpando, un municipio con mucha historia
Para los amantes de la historia y el turismo cultural el pueblo de Villalpando, perteneciente a la provincia de Zamora, puede ser un lugar encantador. Sólo su nombre ya puede vanagloriarse de tener mucha historia. Comenzó llamándose Intercancia por los celtas, con la llegada de los romanos se le conoció como Intercacia. Con la llegada de los godos se le rebautizó como Pando y más tarde con el asentamiento musulmán se le llamó Alpando. Finalmente tras ser reconquistada por los cristianos y para facilitar la pronunciación a sus habitantes se le acabó llamando Villalpando.
El paso del tiempo no ha conseguido dejar en el olvido los hechos y las vivencias acaecidas en el municipio y muestra de esto son sus imponentes monumentos. Destaca entre ellos los restos de sus flamantes murallas, actualmente casi totalmente desaparecidas fechadas en la edad antigua, cuando todavía se le conocía como Intercacia. Aunque todavía podemos apreciar su majestuosidad en las dos puertas de entrada a la villa que se conservan: La Puerta de San Andrés y La Puerta de Santiago.
Los restos del Castillo de los Velasco también son de interés, aunque sólo quede parte de sus muros. Antiguamente tuvo un foso de sesenta pies de anchura y cuarenta de profundidad. La Iglesia de Santa María la Antigua del siglo XIII también es destacable, de hecho fue nombrada monumento histórico-artístico nacional en 1935.
Por último tenemos que nombrar la Plaza Mayor del pueblo, de 2000 metros cuadrados. Se trata de un espacio rectangular porticado donde se incluye el edificio del Ayuntamiento del municipio. Finalmente un dato de interés si te gustan los toros, en agosto se celebra la festividad de San Roque y tiene lugar un encierro de toros tradicional que es de los más antiguos de España.
Vía | Ayuntamiento Villalpando
Foto | Flickr-Frabisa