Calico Ghost Town, un pueblo fantasma muy curioso

Calico Ghost Town, un pueblo fantasma muy curioso

Escrito por: Juan Luis    15 abril 2021     2 minutos

Calico Ghost Town es un antiguo pueblo minero que quedó deshabitado y se ha convertido en una atracción para conocer sus edificios antiguos.

Si eres de esas personas a las que les gusta los pueblos fantasma y los sitios curiosos, entonces este pueblo te gustará. Se trata de Calico, actualmente conocido como Calico Ghost Town ya que es un pueblo en el que no vive nadie y además, se han tenido vivencias paranormales. Se encuentra en el estado de California y su popularidad ha sido muy importante para mantener con vida la historia del pueblo.

Calico tuvo su momento más importante en las últimas décadas del siglo XIX, un sitio donde la minería era la principal fuente para su economía y subsistencia. La «fiebre del oro» en Estados Unidos, aunque fue una fiebre que pasó tan rápido como el mineral preciado se fue agotando, haciendo que muchas personas se fueran a otros sitios con más posibilidades. En este caso la plata fue el principal mineral para la economía local.


Desert

Tras el abandono, Walter Knott quiso comprar Calico con todas sus propiedades. Esto permitió que se pudieran conservar en buenas condiciones muchas de las casas y edificios singulares, ya que los restauró y se asemejan a los originales. En 2005 se denominó Pueblo Fantasma Silver Rush de California, por la importancia que tuvo la minería en este lugar.

Existen edificios curiosos como uno realizado únicamente con botellas de vidrio, haciendo que tenga un aspecto cuanto menos curioso. También existe la posibilidad de entrar a una mina abandonada y ver lo que era en su momento la vida de un minero. No puede faltar la típica casa de la escuela para los niños de la zona.

Si eres valiente, incluso puedes alquilar alguna cabaña en este pueblo fantasma y pasar la noche, ideal para tener una experiencia diferente. Habitualmente sigue abierto de 9 a 17 horas. Se puede pagar para poder hacer acampada en una zona dedicada a ello o simplemente pagar la tarifa para la visita. Hasta 11 años, el precio es de 5 dólares (4,20 euros al cambio), para los adultos el coste son 8 dólares (6.7 euros al cambio)


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