Cenar en la plaza Jemaa el Fna, un placer tradicional

Cenar en la plaza Jemaa el Fna, un placer tradicional

Escrito por: Victor Alós    12 septiembre 2014     2 minutos

Sabemos que uno de los lugares más visitados de Marruecos es la plaza Jemaa el Fna, la gran plaza que se ubica en el centro de Marrakech. Es un lugar que está considerado como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, gracias a toda la tradición marroquí que se respira en ella.

Una de esas tradiciones es cenar en cualquiera de las muchas paradas que se pueden encontrar instaladas en la plaza. Son lugares donde la comida tradicional marroquí tiene una presencia muy importante. Carnes y pescados fritos y cocinados con las especias que pueden encontrar en las cocinas marroquís son los platos que todos esperamos encontrar en esos puestos de comidas.

Pasear entre ellos es toda una experiencia. Además de los sabores y olores que surgen de los fogones de cada una de las paradas, la exposición de los ingredientes y los platos ya cocinados es una buena excusa para abrir el apetito y dejarse atrapar por los aromas y los sabores que esperamos encontrar en ellos.

Cada puesto tiene a varios captadores que informan a los paseantes e invitan a acercarse a su puesto para ofrecerles la cena. Los puestos comienzan a instalarse a media tarde, ya que durante el día no están. En unos minutos están todos preparados, todos los días de la semana y listos para servir los platos a los turistas.

Estos captadores son insistentes, pero saben cuál es su puesto y no se meten en el terreno del siguiente. Eso sí, son bastante persistentes y en cuanto tienen lista la parada comienzan su trabajo para atraer comensales.

Como dato curioso hay que comentar que, en cuanto localizan a un español, saben que tardaremos algo más en sentarnos a cenar, sobre las nueve y media o las diez de la noche. Los visitantes de otros países europeos, que cenan más temprano, no tienen esa suerte.

La toma de pedidos y el cálculo del precio se hace con papel y lápiz y es otra de las cosas curiosas que se encuentran en estos establecimientos. Los precios pueden variar de una vez a otra, pero siempre sale a cuenta disfrutar de sus platos.

Foto | Víctor Alos – Facebook