El Puente de las Cadenas en Budapest

El Puente de las Cadenas en Budapest

Escrito por: slopez    16 mayo 2013     3 minutos

La capital de Hungría posee diversas atracciones culturales e históricas, dignas de verse. Si echamos la vista atrás a la historia de la ciudad, debemos recordar que estaba dividida en dos, Buda y Pest. Finalmente, quedaron unidas con el nombre que actualmente se conoce. Y esta unión se debió gracias a la aparición de los puentes que lo harían posible.

Porque hasta un total de ocho puentes fueron construidos a lo largo de los siglo XIX y XX para confirmar esta unión. Famosos son los puentes de Budapest como el Puente de la Libertad (se tardó en construir cinco años) o el Puente de Isabel, que en su momento fue el mayor puente colgante del mundo. Pero uno de los grandes símbolos de Budapest es el Puente de las Cadenas.

Este Puente de las Cadenas es el más antiguo de la capital e importante símbolo de la misma. Tal es su importancia que aparece en sellos, monedas y billetes húngaros. Comenzó a construirse en 1830 y tardó casi veinte años en ser finalizado, allá por noviembre del año 1849. Por su antigüedad, fue el primer paso reconocido entre Buda y Pest, y también es nombrado como el Puente Széchenyi, en honor a su creador, el conde Istvan Széchenyi.

La impresión que causa el puente al verlo es espectacular, en especial, con toda su iluminación nocturna. Un total de trescientos ochenta metros dan longitud a esta maravilla arquitectónica. A cada extremo del puente, podemos observar a dos leones que hacen de guardianes del mismo. Estos leones se encuentran en las torres que sujetan las cadenas que sostienen el puente.

El objetivo principal a la hora de construirlo era permitir el paso por el río Danubio, el cual sólo se podía realizar en barco o, cuando llegaba el invierno y sus aguas estaban congeladas, a pie. Su importancia comercial, hizo que se acelerará esta obra, aunque ya en el siglo XV existía un puente de pontones (de maderos) para cruzar el río de manera provisional.

La II Guerra Mundial también hizo mella en este puente, al ser dinamitado por las tropas alemanas tras su retirada por el asedio de las tropas rusas, de ahí que el actual puente no sea el original debido a las reconstrucciones que se han tenido que realizar en él. En 1949, fue re-inaugurado el puente, celebrando, a la vez, el centenario de su construcción inicial.

Sería muy difícil no atravesar este puente si hacemos una escapada a la ciudad de Budapest. Sólo con salir de noche a dar un paseo, probablemente ya podamos advertir su presencia iluminada. Desde el puente, la vista que se contempla de la capital es maravillosa (ver el Castillo de Buda iluminado desde allí es una delicia) y puede ser una fotografía inolvidable de nuestra estancia en Hungría.

Vía | disfrutabudapest
Foto | flickr-Artemis Desteredes