Cuatro motivos por los que no cambiar el asiento en un vuelo

Cuando se vuela, muchas veces no tenemos intención de buscar un asiento en concreto y solemos aceptar el que nos toca en suerte. Si viajamos en compañía, procuramos buscar asientos contiguos para estar junto a esa persona o personas con las que viajamos. Si queremos un asiento en particular, lo buscamos y si hay que hacer un gasto extra, pues quizá hay que hacerlo. Pero en ocasiones nos encontramos con que alguien quiere cambiarnos el asiento en el avión.

Esto puede suponer un problema y podemos hacer dos cosas. Una, cambiar el asiento y sentarnos en el lugar de esa persona que nos quiere cambiar el asiento o, directamente, no hacerlo. Estos son los cuatro motivos por lo que no deberías cambiar el asiento durante tu viaje en avión.

Normas de seguridad de la compañía

Hay varias compañías que no permiten el cambio de asientos, por cuestiones de seguridad. Es importante tener localizados e identificados a los ocupantes del avión, por varios motivos. Algunos, claro, no son muy agradables si lo piensas, pero no te permitirán cambiar el asiento sin permiso de la tripulación.

Sentarse junto a un amigo

Una de las excusas más comunes para cambiar el asiento durante un vuelo es poder sentarse junto a un amigo o la pareja. Esto suele ocurrir por una falta de planificación y por haber cogido asientos separados o no haber previsto reservar asientos contiguos. En ese caso, y si no quieres cambiar porque estás cómodo o no quieres moverte, no cambies el asiento por quedar bien. Con previsión, podrían haber evitado eso.

Estás sentado para salir rápido del avión

Es posible que hayas elegido un asiento en la parte delantera del avión para poder desembarcar cuanto antes y dirigirte a coger un avión diferente para continuar con tu viaje. Si alguien quiere cambiar el asiento, dile amablemente que el motivo por el que has escogido este lugar es que tienes que coger otro vuelo en poco tiempo y lo necesitas.

El asiento del cambio es peor o más incómodo

Es posible que alguien prefiera tu asiento porque el suyo es mas incómodo, no está ubicado donde quiere y le gusta más tu sitio. Es posible que su asiento te provoque incomodidad, tampoco te guste y no sea agradable viajar allí. En ese caso, eres tú el que debes valorar qué hacer y te parece bien sufrir tú la incomodidad de un viaje donde no te toca.

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Y una cosa a tener en cuenta es que si quieres cambiarte, no dudes en hacerlo, sea un lugar más adecuado o no lo sea. Lo importante es que sepas que, si no es por causa mayor y a requerimiento de la tripulación, no tienes por qué cambiarte de sitio, incluso si te lo pide alguien de la tripulación por favor.

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