Rüdesheim, localidad de importantes viñedos

Escrito por: slopez    8 abril 2013     3 minutos

Si nos situamos en el centro del país bávaro, localizamos, a orillas del río Rin, una ciudad perteneciente al estado de Hesse. Su ambiente de tintes históricos y sus magníficos paisajes la convierten en un destino turístico más que atractivo. Una ciudad que tiene bastante que mostrar y cuyo nombre es Rüdesheim.

En Rüdesheim, además de los diferentes lugares de interés que podemos visitar, resalta su importancia en relación al mundo del vino. Famosos son sus viñedos y, en especial, una vinoteca con mucha historia en la ciudad. La vinoteca Georg Breuer, de las de más renombre de todo el país. Con más de treinta hectáreas pobladas de viñedos, sus bodegas son famosas tanto para los profesionales del mundo del vino como para los visitantes que pasan por allí. Desde las 10 de la mañana hasta las 6 de la tarde se pueden degustar y comprar, tanto los vinos producidos a nivel local como los vinos importados.

Entre los lugares interesantes para visitar podemos nombrar los siguientes. El Niederwalddenkmal, monumento situado en el Parque Turístico de Niederwald, cercano a la ciudad, se realizó para conmemorar la fundación del imperio alemán y data de finales del siglo XIX. Sus 38 metros de altura sirven para glorificar la unión de todo el pueblo alemán.

Una de las calles más importantes es la Drosselgasse, ubicada en el casco histórico de la ciudad. Considerada la primera calle de la ciudad, sus ciento cuarenta y cuatro metros de largo acogen diversidad de restaurantes, bares, pubs y comercios para deleite de todo el mundo. Famosas son las actuaciones musicales en directo que se muestran en sus tabernas, lo cual llama la atención de millones de turistas al año.

Otro lugar para apreciar es la Torre Binger Mäuseturm, antigua torre de defensa del siglo XIV, creada como aduana. Destruida a finales del siglo XVII, fue reconstruida a mediados del XIX, llegando a ser torre reguladora de tráfico de buques a mediados de la década de los setenta (ya en el siglo XX). Desde el 2002, se la proclamó Patrimonio de la Humanidad. Actualmente, está en desuso.

Y no podemos olvidarnos de los dos carrillones que están ubicados en el centro histórico. Su funcionamiento puede verse desde las 9.30 de la mañana hasta las 10 de la noche, estando uno de ellos en el Castillo de Rüdesheim en Drosselgasse, siendo muy curioso el movimiento de figuras de madera que aparecen. El otro carrillón se encuentra en el Gabinete Mecánico Musical Siegfrieds (por la misma zona), destacando por la porcelana de la que están construidas sus campanas.

Y no podíamos acabar este artículo sin descansar para probar la cocina de Rüdesheim. Destacamos la Sauerkraut, un plato elaborado con carne de cerdo, salchichas y col, o los diferentes guisos hechos con carne de jabalí, conejo o venado. Otro plato a probar es el Wiener Schnitzel, filetitos de ternera empanados y acompañados con rodajas de limón.

Vía | infinity-travel
Foto | flickr-notafish